Esto es una sombra

  Alicia Rodríguez Berenguer A pocos metros de aquí hay un escaparate. Desde que frecuento esta zona de la ciudad siempre ha estado vacío, siendo tan solo un espacio tras un cristal. Pero cierto día me sorprendió ver en la blanca pared del fondo una frase: “Esto es una sombra”. Pronto comprendí que efectivamente era una sombra, la sombra de unas palabras que alguien había escrito en color plateado sobre el cristal y que apenas se percibían. Cada día al pasar por el escaparate buscaba la frase, esto es una sombra, y algo tan sencillo, que no sé si escribió […]

¡Qué bello es vivir!

¡Qué bello es vivir! ¿Es esto el título de una película o es una afirmación filosófica? Las dos cosas. Por estas fechas en que cambiamos de año, solemos tener la ocasión de ver la reposición del clásico del cine Qué bello es vivir. Para los que no lo conocen, es de libre acceso en Internet desde que a alguien se le olvidó renovar el copyright hace muchos años. A veces he recordado esta película cuando observo a las personas que me rodean y el mundo en que vivimos. El título de la película anticipa el desenlace. Pero antes del final […]

Aprovechar el presente

  Séneca ya nos lo advirtió: el espacio que vivimos no es vida sino tiempo. Y es esta una diferencia interesante si realmente queremos extraer el jugo a la vida. El hecho de vivir requiere aprender cómo se hace eso de vivir, y obligatoriamente, qué significa morir. Solo teniendo en cuenta que hay un principio y un final, podremos dedicarnos adecuadamente (y es nuestro deber hacerlo) a extraer de cada circunstancia, de cada etapa vital, de cada error o de cada acierto, una pieza más para resolver el enigma que a todos nos es planteado: ¿cuál es el sentido de […]

Principito

El Principito en el planeta del buscador de Google

El tercer planeta estaba habitado por un buscador de Google. Fue una visita muy corta, pues hundió al principito en una gran melancolía. —¿Qué haces ahí? —preguntó al buscador que estaba sentado en silencio ante unas pantallas de Google vacías y otras tantas llenas de resultados. —¡Busco! —respondió el buscador con tono lúgubre. —¿Por qué buscas? —volvió a preguntar el principito. —Para averiguar. —¿Para averiguar qué? —inquirió el principito ya compadecido. —Para averiguar qué es lo que busco —confesó el buscador bajando la cabeza. —¿Pero qué buscas? —se informó el principito deseoso de ayudarle. —¡La explicación de por qué busco! […]