Decía el profesor Livraga que “la filosofía es una música que se hace con el alma, no un simple acopio de conocimientos y datos, sino una construcción armónica que relaciona las cosas y les da sentido, elevándolas a las regiones donde las cosas tienen sentido y la esencia invisible nos llena el corazón”.
Todos llevamos un filósofo en nuestro interior y puede ser nuestro mejor amigo.