
Si busca persuadir a alguien de que hace mal, actúe bien. Que no le importe si no le convence. Los hombres creen en lo que ven. Consigamos que vean (Henry David Thoreau).
El «para qué» nos da una finalidad, y el «hacia dónde» nos indica los pasos a recorrer y el sentido en que habrá que recorrerlos para que nos conduzcan hacia la meta propuesta. Sin dirección, nuestros actos corren el riesgo de diluirse en cualquier hueco del espacio y del tiempo, acrecentando la angustia al comprobar que no podemos conseguir objetivos concretos (DSG Qué hacemos con el corazón y con la mente).