En este blog no solemos expresar ninguna opinión «oficial» de Nueva Acrópolis. Lo creamos para expresar opiniones personales, puntos de vista, inquietudes y la forma de ser y de vivir de gente normal y corriente que además son filósofos idealistas. En este blog escribe gente de variada procedencia, de ciudades distintas, de distintos niveles de educación. Hemos tenido personas que han dejado de escribir y otras que se han incorporado. Lo que siempre digo a los que aquí escriben es que traten de mostrar una visión personal. Porque Nueva Acrópolis no es un bloque monolítico y cerrado, sino que está formado por personas, por individuos, miles de ellos, cada uno con su forma de ser y la mayoría con un objetivo común, para tratar de obtener una formación ética y filosófica que haga que este mundo sea mejor.
Sin embargo, Nueva Acrópolis recibe muchas críticas de personas basadas en sus prejuicios acerca de lo que creen que es esta Institución, normalmente sin conocerla, y hablando de oídas. Y por supuesto, sin tener en cuenta a las personas que la forman. Porque somos tan libres como cualquier otro ciudadano y también queremos que se escuche nuestra voz, no que se calle basándose en prejuicios.
Cierto es que en el mundo actual nadie está libre de críticas y que normalmente recibimos numerosos apoyos por la labor que estamos haciendo. Pero en algunos medios de Internet es cansino el cliché que se aplica habitualmente a nuestra Asociación. Es un prejuicio que proviene de críticas de finales de los años setenta y que desde entonces no nos abandona. Se acusa a Nueva Acrópolis de una ideología política que es contraria a sus principios fundacionales y de formar un grupo sectario (una “sekta” que escribía nuestro más reciente ofensor) que también es contrario a nuestro principio de formar un núcleo de personas sin distinciones (sociales, económicas, culturales, sexuales, religiosas, raciales, etc.).
Pues sí, estoy harto porque muchas de las propuestas que queremos hacer por mejorar nuestra sociedad se ven frustradas por esas críticas. ¿Que un músico es invitado a dar un concierto esta semana en un local de Nueva Acrópolis? Se hace una campaña en un foro internauta criticándole por su colaboración con la “sekta” y señalándole con teléfono y email para que los “indignados” le acosen hasta que cambia de parecer. ¿Que en Twitter recordamos la importancia de la mejora ética del individuo para mejorar la sociedad? Pues otra persona critica no la validez de la propuesta sino la procedencia de la misma. ¿Que un adolescente tiene que preparar para la clase de ética un powerpoint sobre sectas? Pues allá que aparece una foto de un grupo nazi que no tiene la más mínima relación con Nueva Acrópolis, para ilustrar textos sobre NA. ¿Que nuevos estudiantes se anotan en alguno de los cursos que promueve Nueva Acrópolis? Pues cuando buscan en Google más información sobre NA, enseguida aparece el calificativo “secta”, lo que les hace dudar de lo que pueden ver y comprobar de primera mano en la sede a la que acuden a sus clases.
Recibimos continuamente trabas para cualquier acción que queremos emprender. Trabajamos en el 99% de los casos sin subvención alguna porque ninguna administración ni empresa se atreve, ante este acoso de críticas por Internet, a concedernos nada, no vaya a ser que se utilice políticamente contra ellos. Nos critica la Iglesia, por prejuicios sectarios. Y nos critican los ateos por lo mismo. Nos critican los partidos de extrema izquierda por prejuicios políticos. Y nos critica la extrema derecha por lo mismo.
Por eso estoy harto. Que sepáis todos los que nos criticáis sin conocer, los que os limitáis a repetir lo que otros dicen sin formar vuestra propia opinión, que todas esas críticas afectan a muchas personas que como yo trabajamos de forma desinteresada, sin recibir ninguna compensación económica por conseguir un mundo más justo, un mundo más bueno, un mundo más bello. Pensadlo la próxima vez que digáis “¿Nueva Acrópolis? Ah, sí, esa secta”, porque estáis destruyendo las ilusiones de muchas personas que lo que queremos es dejar este mundo mejor de como lo encontramos.
¿Como vamos a hacer un mundo mejor al que tenemos y del que nos quejamos tanto, si seguimos cometiendo los mismos prejuicios de hacen el juego a los manipuladores y explotadores de la ignorancia y la desesperación?. Un mundo mejor es posible pero con el alma abierta y la verdad de frente. Gracias Juan Carlos, Gracias Nueva Acrópolis
Muy cierto, si revisamos las páginas web de los «grupos anti-secta» nos daremos cuenta que sus observaciones no proceden de estudios sociológicos o psicológicos sino mas bien de sus prejuicios. Estos grupos de «casa sectas» proceden de dos sectores muy claros:
1. Grupos religiosos fundamentalistas que califican de secta todo lo que no proceda de su fe.
2. Grupos de pensadores materialistas y ateos que califican de secta a todo lo que no esté de acuerdo son su forma de ver el mundo.
En pocas palabras, el término «secta» no es más que un adjetivo despectivo que ciertos grupos dan a otros solo por diferencias ideológicas.
Lo malo está en que muchas personas con escaso nivel de análisis hacen caso a estos adjetivos como si fueran verdades absolutas.
Hay personas que no tienen el valor de pensar sobre sí mismos y de comprobar por sí mismos la valía de algo, y esas personas no son válidas para ningún movimiento. Están de sobra, por lo que nada se pierde… Es preferible que sigan viviendo de lo que le digan y lo que le cuenten. Las únicas personas que interesan son las que piensan y deciden por sus propias convicciones.
Las críticas sin fundamentos ni conocimientos,las que repiten algunas personas una y otra vez durante todo su vida; la manera de loros viejos. Es otro buen motivo de indignación.
Entiendo tu estado de ánimo, Tachen, pero como tú bien dices, hay mucha gente que opta por acercarse a alguna sede y conocer la labor de Nueva Acrópolis por sí misma.
Ya lo decía el filósofo Marco Aurelio: «la mejor venganza es no claudicar».
Estoy totalmente de acuerdo, Tachen, me ha gustado mucho lo claro y lo bien que lo dices, porque a mí también me tiene un poco harta la gente sin criterio propio que habla sin saber. Y me encanta la cita de Marco Aurelio que apunta Dolores: «La mejor venganza es no claudicar»
Recordar que el origen de la palabra secta es separar y nada más alejado de Nueva Acrópolis.
Totalmente de acuerdo Juan Carlos, más claro no se puede decir. Yo tambien estoy harto.